El equipo humano
Eulàlia Batallé Olay
Desde temprana edad tuve una fuerte tendencia al contacto con animales, lo que me llevó a desarrollar estrechos lazos con ellos y a entenderlos como iguales. La dedicación, el respeto y la búsqueda constante de superación y de mejora de las relaciones con los animales han sido los pilares fundamentales de mi formación. Mi experiencia laboral comenzó en el mundo ecuestre; la convivencia y trabajo con los caballos ha sido el centro de mi vida, permitiendo darme a conocer en el mundo ecuestre de manera profesional a altos niveles y pudiendo perfeccionar mi técnica y manejo para ser una amazona completa.
Después de mi estancia en EEUU en el que pretendía profundizar en la comprensión y distintas técnicas del mundo del caballo, me inicié en el ámbito del entrenamiento de aves exóticas en el que, juntamente con el aprendizaje que adquirí de la mano de Linda Parelli, me proporcionó cada vez más una visión más consciente acerca del entrenamiento animal a través del refuerzo positivo y a la vez, una nueva mirada en las relaciones entre humanos y animales.Tras estos últimos años entre los entrenamientos tradicionales y las técnicas basadas en el condicionamiento operante, actualmente curso mis estudios superiores en psicología comparada mientras dirijo el proyecto Simbiosi y gestiono Emplumados Club, una asociación sin ánimo de lucro donde proporcionamos a loros y a sus dueños responsables un espacio donde poder compartir experiencias y mejorar la convivencia entre ambos.
El equipo animal
Ellos han sido sin duda los grandes maestros que me han llevado hasta donde estoy ahora, acompañándome en proceso de aprendizaje y perdonándome en mis fallos con el incondicional apoyo que los animales nos brindan. Es por ello que deben formar parte del equipo de Simbiosi.
Pep (Equus africanus)
Rescaté tras pasar sus tres primeros años de vida viviendo en un padock sin cubierto y sin salir. Presentaba grandes problemas de agresividad y frustración. Tras 3 años de trabajo conjunto, un cambio de alojamiento y prácticas de entrenamiento con refuerzo positivo, Pep es un burro nuevo; participa activamente en los entrenamientos y disfruta con ellos. Juntos hemos podido desarrollar técnicas típicas de manejo ecuestre pero basándonos en la colaboración conjunta y no mediante presiones. Ha sido, es y será la prueba fehaciente de que el trabajo constante y los pequeños avances son los que marcan la diferencia y que el bienestar animal debe aplicarse a todos, pues todos tienen derecho a ser felices.
Rifii (Ara ararauna)
Rifii fue la decisión que abrió el nuevo camino que me ha traído hasta aquí. Me obligó a cuestionarme cosas que hasta entonces me parecían hechos consolidados y me hizo salir fuera de mi zona de confort. Gracias a él, me formé en nuevas técnicas basadas en el refuerzo positivo dentro del entrenamiento y en el manejo de aves exóticas. Viví su proceso de aprendizaje de vuelo libre como mis propios pasos para alzar el vuelo. Fue él sin duda un gran descubrimiento en mi vida personal y profesional y un compañero con el que seguir aprendiendo el resto de mi vida.
Diva (Equues caballus)
Esta yegua fue mi compañera en mi gran experiencia horsemanship en el Rancho Parelli en Colorado (EEUU). De su lado y bajo la supervisión de Linda Parelli profundicé más de lleno en las estrechas relaciones que se forman mediante el entrenamiento y sin ella no habría sido lo mismo.